¿Los súper trabajos necesitan de súper habilidades?

¿Los súper trabajos necesitan de súper habilidades?

por Sandra Zuluaga

Hace muchos años se decía que quien no supiera computación era un analfabeta funcional. Hoy, las habilidades que exigen los súper trabajos han cambiado este paradigma: ahora se habla de dominar las habilidades blandas, pero mucho más que eso: se trata de nuevas maneras de aprovechar el talento humano.

Como ya he mencionado en artículos anteriores de esta serie, los súper trabajos no son puestos o actividades que se crean por generación espontánea, sino que responden a la evolución que las herramientas digitales, la inteligencia artificial y las necesidades de las personas experimentan a lo largo del tiempo.

No olvides leer mi artículo anterior:Fijando-metas-en-epoca-de-pandemia-mision-imposible-para-el-siguiente-ano.html

Para entenderlo solo basta con recordar que ciertas habilidades que hoy damos por sentado en el ámbito profesional eran más especializadas, como el uso de procesadores de texto (Word, Pages, Google Docs), del correo electrónico o teléfonos inteligentes. El mundo cambia, y con el ámbito laboral también.

Claro está, no quiere decir que las transformaciones sean automáticas o fáciles para todas las personas, en distintas áreas, mercados y segmentos. Al igual que con las clases de computación a finales del siglo XX, las habilidades que exige el nuevo entorno del trabajo tienen que aprenderse, muchas veces desde cero, en las escuelas y universidades, pero también en las empresas para que el talento que ya es parte de sus filas logre estar al día con las exigencias de su entorno.

¿Cuáles son estas habilidades? Es posible hacer una división de tres categorías, si tomamos en cuenta un interesante estudio que llevó a cabo Udemy, una plataforma de aprendizaje en línea con una oferta muy amplia de cursos. Gracias a la publicación de “2022 Workplace Learning Trends Report”, Udemy comparte datos sobre el tipo de entrenamiento que sus miles de usuarios en todo el mundo buscaron durante 2021, un año en el que la gente debió aprender a utilizar herramientas digitales —para tener juntas con sus equipos, completar tareas, analizar resultados de desempeño, contratar nuevo personal, hacer reportes de ventas—, pero también a fortalecer esas habilidades que antes no se desarrollaban con frecuencia en las aulas, conocidas como blandas o soft skills. A eso hay que sumarle otras que nacen a partir de la obtención de datos que se recolectan a través del uso de internet.

3 habilidades para tener un súper trabajo

● Habilidades blandas. Estas son las que tienen que ver con la creatividad, comunicación, resolución de problemas, empatía y trabajo en equipo. No son las que aparecen normalmente en el currículo de las universidades, y antes no estaban en la mente de la gente que deseaba convertirse en experto en su ramo. Sin embargo, la convivencia de tres generaciones en el mismo entorno laboral (85 % de los profesionales en México así lo experimenta), la rapidez con la que la normalidad se trastoca y obliga que nos adaptemos, además de que las exigencias de los consumidores piden, sí, tecnología, pero también un trato siempre humano.

● Habilidades tácticas. Son las que funcionan con conocimiento técnico (como contaduría) y soft skills (como interpretación de datos) para tomar decisiones eficientemente, apoyándose en datos medibles y reales, que permiten comprender por qué una estrategia es una buena idea. Udemy habla de inteligencia de negocios (que incluye estadísticas), diseño y experiencia del usuario (que incluye diseño gráfico, por ejemplo) para creación de sitios web y aplicaciones, marketing y recursos humanos, entre otras.

● Habilidades técnicas. Son las que se aprenden para operar maquinaria, software y herramientas que necesitan un cierto nivel de conocimiento y experiencia para funcionar correctamente. Con la integración de la inteligencia artificial y plataformas digitales, estas habilidades han cambiado bastante. Tanto, que ya no son suficientes por sí mismas, sino que deben apoyarse en otras.

Un tipo de habilidad para llegar al futuro: power skills

Aquí es donde se mencionan otras habilidades distintas, que se han convertido en las más cotizadas de los últimos años porque van más allá de una simple definición. Debido a la urgencia con que las empresas las buscan, se han etiquetado como power skills: aquellas relacionadas con el desarrollo del liderazgo, como comunicación y trabajo en equipo, productividad, gestión del tiempo, desarrollo personal y bienestar, que la inteligencia artificial no puede cumplir.

Un estudio de McKinsey Global Institute encontró que, independientemente de la ocupación, sector o ubicación geográfica, los empleados necesitan un grupo de power skills clave: añadir valor con la ayuda de herramientas de automatización de procesos y máquinas inteligentes, operar en un entorno digital, adaptación a nuevas maneras de trabajo y tecnologías.

Las power skills están entre las más solicitadas por las empresas que ahora encuentran vacantes en sus departamentos. Después de lo que en Estados Unidos se conoció como «el Gran Abandono», pareciera que hay oportunidades para que los súper trabajos tengan su gran incursión, y necesitará personas que tengan estas power skills o que puedan desarrollarlas con el apoyo de la organización que las reciba.

¿Cómo luce esto en los súper trabajos?

2 ejemplos de súper trabajos y las habilidades que necesitan

Arquitecto de la experiencia del cliente: La experiencia del cliente se relaciona con todos los puntos de contacto que una persona tiene con una empresa, y la forma en que esta se esfuerza para que en cada uno se cumplan las expectativas de su posible cliente para que se involucre más en su negocio. El arquitecto de la experiencia del cliente es capaz de utilizar herramientas digitales que miden visitas a sitio web, interacciones en redes sociales, respuestas en formularios y encuestas, además de la afluencia a tiendas físicas, compras hechas en efectivo, así como artículos más vendidos y ofertas con mayor éxito para comprender el tipo de mejoras, ajustes y estrategias que brindarán un buen servicio al cliente, no importa cómo decida acercarse a la empresa.

Analista de casos: Este podría estar relacionado con el mundo de los abogados. En muchas ocasiones, su trabajo les exige buscar precedentes que apoyen los resultados que desean obtener al tomar ciertos casos. Puede ser una actividad titánica, incluso con la ayuda de un buscador parecido a Google, que con teclear un término, sentencia o número de registro recupere documentos pertinentes. Lo que en realidad se necesita es que el analista de casos cree un algoritmo especialmente diseñado para una investigación en particular (y que pueda crear otro cada vez que se lo pidan), que arroje resultados más pertinentes y que tenga el impacto deseado en su litigio.

Es decir, las habilidades que requieren los súper trabajos necesitan más el aspecto analítico, interpretativo y creativo del ser humano. Para lo técnico, ahí están las máquinas.

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