La salud mental y la búsqueda del equilibrio entre lo laboral y lo demás
La salud mental y la búsqueda del equilibrio entre lo laboral y lo demás
por Sandra Zuluaga
Si se desea contar con una empresa con buena salud mental, es momento de despedirse de la idea de que lo personal no tiene cabida en lo laboral.
Antes de que la pandemia del 2020 empujara el tema de la salud mental al frente, las empresas ya comenzaban a incluirla dentro de las preocupaciones clave para procurar el bienestar en sus colaboradores, gracias a la presión de los mismos empleados. Sin embargo, la conversación alrededor de este asunto todavía no ocurre de manera espontánea ni oportuna dentro del entorno laboral.
No olvides leer mi artículo anterior: Por-que-importa-hablar-de-salud-mental-dentro-de-la-empresa.html
Por un lado, cuando se menciona a la salud mental, muchas personas solo piensan en casos crónicos o que requieren atención médica, como la depresión clínica. Esto quiere decir que otras dolencias que impactan a la mente de las personas —llámense estrés, ansiedad o procesos de duelo— no se toman en cuenta dentro de los manuales que los profesionales de recursos humanos crean para darle seguimiento.
¿El resultado? Las personas que trabajan dentro de la organización no se sienten con la apertura de mencionar cuando experimentan señales tempranas de problemas de salud mental, o incluso no saben reconocerlas. La situación se convierte en una bomba de tiempo que, hasta que explota, se le pone atención y entonces la conversación gira alrededor del control de los daños causados, cuando pudo haberse evitado el desastre.
Para los colaboradores, se refleja en cansancio extremo, poca motivación, desempeño deficiente, depresión, sensación de fracaso. Mientras que las empresas lo resienten en una tasa cada vez más elevada de absentismo, disminución de la productividad y aumento en gastos de cuidado de la salud de sus empleados. No hay, pues, un lado positivo en ignorar que la salud mental debe cuidarse dentro y fuera de la organización para el beneficio de todas las personas en nómina y la misma compañía.
Entonces, ¿cómo ayudar a que la salud mental sea óptima dentro de la empresa? Considerando lo siguiente.
La vida personal afecta la vida laboral
Una buena idea es aceptando de una vez que debe existir un equilibrio consciente entre la vida laboral y la vida personal. Ese paso podría arrancar el camino hacia un buen resultado. A pesar de que se ha intentado desde siempre, es imposible olvidar lo que ocurre fuera de la oficina (o el taller, el consultorio, la fábrica, etc.) simplemente al arrancar el horario de trabajo. Si hay un evento que afecta la estabilidad de una persona, tocará todos los aspectos de su vida. Por lo tanto, es importante que la empresa reconozca que, por ejemplo, un par de días de luto no serán suficiente para alguien que acaba de perder a un ser querido, y que es posible que necesite más apoyo que permita que lo supere.
Dicho esto, es importante que se elimine la idea de que alguien profesional es capaz de «apagar» sus emociones, sino que más bien tiene las herramientas para lidiar con ellas de manera inteligente, especialmente porque cuenta con el respaldo de sus jefes, líderes y colegas. Lo que nos lleva al siguiente punto.
Los esfuerzos rumbo a mejorar la salud mental merecen apoyo
Lejos de señalar una debilidad cuando alguien comparte la necesidad de un día libre para descansar o dedicarse a celebrar únicamente a las personas que sacrifican vacaciones o si tiempo personal en favor de la empresa, quienes están en puestos de liderazgo y al frente del área de recursos humanos deben respaldar a quienes buscan mejorar su salud mental.
También se requiere de valentía aceptar que una situación personal causa mella en el ánimo o que un proyecto se ha convertido en causa de estrés desmedido porque habrá quien lo considere señal de poco aguante. Sin embargo, externar estas preocupaciones ayudan a prevenir que un equipo completo sufra por el trabajo deficiente de un integrante lejos de su mejor momento, o que un talento se pierda porque recursos humanos prefirió no escuchar sus inquietudes.
El equilibrio entre trabajo y vida importa a la empresa
Como se explica en el artículo «How to create a workplace that supports mental health», publicado en Forbes, este tipo de equilibrio es importante porque previene el síndrome de burnout, reduce estrés y aumenta la motivación para tener un mejor desempeño dentro de la empresa. Por eso, la organización debe conocer el contexto de sus colaboradores, para que construya un entorno flexible que ofrezca, dentro de sus posibilidades, opciones que permitan cumplir con su trabajo sin olvidarse de su familia, pasatiempos o proyectos fuera de lo laboral. Esto quiere decir, además, que no se trata únicamente de dar un día de home office a la semana, sino revisar y considerar lo que beneficiará a todos, o al menos a la mayoría, como se explica a continuación.
Se debe buscar un trato justo para los colaboradores
Para lograrlo se deben tomar en cuenta las necesidades y preferencias de las personas que trabajan en la empresa. Primero, hay que reconocer que existe una diversidad de perfiles, por lo que asumir que a todos les gustará colaborar de la misma forma puede afectar a más de uno. Seguro, a los extrovertidos les entusiasmará compartir sus ideas con presentaciones frente a todos los equipos, pero a quienes sean más reservados les causará ansiedad o disminuirá sus participaciones si se les exige comportarse igual que los otros. Lo mismo ocurre entre los que tienen hijos en casa y los que no; quienes comunican mejor sus ideas con palabras escritas y los que prefieren hablar. Abrir la puerta a sugerencias para distintas situaciones permitirá que cada quien se sienta tomado en cuenta. Tomar medidas para implementar soluciones que busquen incluir a esas personas tendrá un impacto positivo.
Para cerrar, la clave sigue estando en la comunicación en ambas direcciones. La empresa debe ser la primera en dejar en claro que desea escuchar las inquietudes de sus colaboradores y demostrar que desea apoyarles para que el trabajo sea en parte responsable de una salud mental óptima. Un estudio que se cita en «8 Ways Managers Can Support Employees’ Mental Health» (Harvard Business Review) demostró que los empleados que han sentido que sus gerentes no son buenos en comunicarse han experimentado un 23 por ciento más de problemas de salud mental que el resto, desde que comenzó la pandemia. Es decir, cuando se trata de salud mental, el trabajo afecta en la vida personal, y viceversa.
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ResponderEliminarMantener un equilibrio entre trabajo y vida personal es crucial para la salud mental. La terapia psicológica ofrece herramientas para gestionar el estrés laboral y fortalecer la resiliencia en todos los aspectos de la vida.